Junto con la innovación, la actualización digital y el panorama futuro con los avances de la inteligencia artificial, la tecnología está siendo un generador de oportunidades al alcance de cualquier emprendedor/a preparado/a para identificarlas y rentabilizarlas.

El entorno empresarial se ha vuelto más accesible y prometedor gracias a la innovación tecnológica, facilitando la cercanía al ecosistema empresarial y agilizando procesos de gestión empresarial. De hecho, en la potenciadora de negocio pitaya, de la cual soy partner, la utilizamos a los inicios y sigue siendo una máxima a día de hoy. La tecnología está permitiendo a todas aquellas personas interesadas en emprender, aprovechar una amplia gama de herramientas digitales que pueden mejorar la eficiencia, la productividad y la toma de decisiones en sus proyectos.

Pero, ¿en qué puede ayudar la tecnología a emprender un negocio?

Una de las ventajas más destacadas que ofrece hoy en día la tecnología es la automatización de procesos. Tanto a nivel profesional, como personal, la tecnología nos ofrece soluciones especializadas para abordar los retos que nos puedan surgir de manera prácticamente instantánea. De hecho, ese fue su objetivo desde un principio, para «facilitarnos la vida».

Por un lado, la agilidad de los trámites con la Seguridad Social o con la Agencia Tributaria, que permiten realizar un gran número de gestiones que, antes, requerían presencialidad. Por ejemplo, altas y bajas de empleados y empleadas, presentación de impuestos, domiciliaciones, presentación de resultados o cierre de años y trimestres, entre otros. Un alto porcentaje de los modelos que debe presentar una compañía para realizar su actividad, puede hacerse online, tanto mediante una gestoría como desde la empresa.

Por otro lado, con herramientas y software especializados en administración, las tareas repetitivas y laboriosas que antes requerían mucho tiempo y recursos pueden ahora ser realizadas de forma mucho más eficiente y rentable con solo unos clics. Aplicaciones de contabilidad en línea, como Xero o QuickBooks, han revolucionado la forma en que se gestionan las finanzas empresariales. Son plataformas que permiten realizar desde un seguimiento de los ingresos y gastos de la compañía y su facturación, hasta informes financieros y declaraciones de impuestos de manera ágil.