Es difícil no leer esta afirmación de Brian Weiss, y sentir cierta sintonía con esta manera de hacer las cosas.
¿Sería un buen principio a tener en cuenta en los procesos de cambio de las organizaciones?
Disfrutar las flores, comer los frutos, mantener las raíces.
En el ámbito empresarial:
¿Qué serían las flores?
¿Qué serían los frutos?
Y, ¿qué serían las raíces?
Hablando de transformaciones y cambios, tiene Seth Godin la interesante teoría de «Empujar algo cuesta abajo».
Lo ejemplifica con la historia de Lynn Gordon, diseñadora y pensadora brillante, que durante diez años se dedicó a diseñar juguetes y artículos blandos para madres con niños pequeños. Todas las empresas de USA la rechazaron, no tenían nada que ver con ella. «Lynn, es sencillo – le dijo él – las empresas de juguetes no están organizadas para tratar con diseñadores de juguetes». – «Vente conmigo al negocio de los libros, porque en ese negocio hay gente verdaderamente lista y mal pagada que espera que una idea nueva aterrice en su mesa». En dos meses creó las cartas de actividades Baraja52® de las que (al final) se vendieron más de cinco millones».
¿Es introducir cambios «cuesta abajo» la manera más efectiva de hacerlo?
Disfrutar las flores, comer los frutos, mantener las raíces.
– Verónica Ferrer Moregó, CEO en Pitaya Business