¿Has oído alguna vez el término de apercepción?
Es un término que acuñó D.W. Winnicot. Y en esencia significa: «ver las cosas de un modo nuevo todo el tiempo».
En filosofía es una percepción muy atenta, clara y consciente. En psicología es «el proceso por el cual una nueva experiencia es asimilada y transformada en residuo de la experiencia anterior de un individuo para formar un nuevo todo». Las dos nos valen para los negocios.
Suena ligero, pero su impacto es profundo. ¿Alguna vez te has sorprendido diciéndote: «esto ya sé por dónde va, no es la primera vez que lo veo»?
En realidad no se trata de desechar la experiencia, ni de desaprovechar conocimiento ya adquirido. Pero la apercepción te abre la posibilidad de ver (lo mismo) pero con una nueva mirada. Más creativa, más abierta, más nueva.
No hay que olvidar que cualquier organismo formado por personas y sus acciones motivadas es un organismo vivo. La compañía es un organismo vivo. Tú no eres la misma persona que ayer. Y nadie de tu equipo lo es.
¿Por qué no dejar atrás la percepción clásica e intentar abordar los retos con a-percepción?
Por cierto, para acabar el año por todo lo alto y plantear un 2025 increíble sabes (si no lo estamos haciendo ya) que tienes aquí un equipazo entre Barcelona y Madrid que conseguirá resultados, frescura, orden y equilibrio para vuestros retos más ambiciosos. Escríbenos.
¿Has oído alguna vez el término de apercepción? Ahora ya sí.
– Verónica Ferrer, partner y directora de estrategia de pitaya/pitayanext