Enseñó un gráfico donde todos los puntos seguían una misma tendencia.
Excepto uno. Que se desmarcaba claramente de los demás (por encima).
Pero dijo, que no era problema. Podría eliminarlo. Porque era, lo que en estadística se llama, un error de medición.
«Y sé que es un error de medición, porque está estropeando mis cálculos».
La audiencia entendió la ironía y se oyeron carcajadas.
Hablaba Shawn Achor CEO de Good Think Inc. una empresa con sede en Cambridge que investiga valores atípicos positivos (personas que están muy por encima del promedio) para comprender dónde se cruzan el potencial humano, el éxito y la felicidad.
Cuando conocimos de Shawn, nos llamó la atención un aspecto de su trabajo:
La lucidez de estudiar el punto que sobresale.
Por que lo normal sería eliminarlo, considerarlo un error de medición y sacar conclusiones en función de la tendencia general. Pero esto, aplicado al estudio del éxito y la felicidad, tiene un gran riesgo:
Y es que se sacan conclusiones en función de dónde están el grueso de los puntos. De manera que, lo normal se hace sinónimo de la media y, lo que no está en ese parámetro se considera una anomalía. No se estudia. No se analiza.
¿Por qué algunos de vosotros estáis tan encima de la curva en vuestra habilidad intelectual, atlética, musical, creativa, niveles de energía, capacidad para asumir retos o el sentido del humor? – pregunta él. Lo que sea, en lugar de borrarte, prefiero estudiarte.
Este enfoque aplica también a la dirección empresarial.
Porque, a veces, en las empresas suceden cosas extraordinarias. Personas brillantes en el equipo. Clientes que suben la media de facturación, exigencia y crecimiento. Oportunidades que multiplican por mil lo sucedido hasta la fecha. A estas alturas, ya habrás vivido más de una.
Y, algunas veces, sí se celebra pero se toma como un hecho casual, que ha estado bien y lo recordaremos en la historia de la empresa. Pero no nos detenemos a analizarlo en profundidad. Lo consideramos un hecho exitoso, pero anormal. Y es una pena.
Es una pena porque, como dice Shawn, lo anormalmente extraordinario, contiene información. Y la información, en una profesión que se basa en tomar decisiones, tiene un valor incalculable.
– Verónica, CEO en Pitaya Business.